La familia es el núcleo donde se forman las primeras relaciones y patrones emocionales. Es un sistema dinámico en constante evolución, donde los cambios o dificultades en un miembro pueden repercutir en todo el grupo. Nuestra propuesta de terapia familiar integra la riqueza de la Terapia Gestalt con el enfoque sistémico, creando un espacio único para explorar, comprender y transformar las relaciones familiares de forma profunda y sostenible.

¿Por qué combinar Gestalt y Sistémica?

La Terapia Gestalt se centra en el presente, ayudando a cada miembro de la familia a tomar conciencia de sus emociones, comportamientos y necesidades. Por su parte, la Terapia Sistémica aborda la familia como un sistema interdependiente, explorando las dinámicas relacionales, los roles y las pautas de interacción. Juntas, estas perspectivas ofrecen un enfoque integral que permite:

• Identificar patrones disfuncionales.
• Favorecer la comunicación auténtica.
• Comprender las relaciones como parte de un sistema.
• Promover la responsabilidad compartida.

¿Cómo se trabaja en la terapia familiar con este enfoque integrado?

En nuestras sesiones, combinamos herramientas gestálticas dinámicas y experiencias con intervenciones sistémicas que permiten observar y transformar las interacciones familiares. Trabajamos tanto con las vivencias individuales como con la dinámica global de la familia, favoreciendo:

• La toma de conciencia de roles y patrones relacionales.

• El fortalecimiento de los vínculos familiares.
• El desarrollo de acuerdos y soluciones prácticas.

¿Cuándo puede ser útil esta terapia?

La combinación de Terapia Gestalt y Sistémica es especialmente eficaz en situaciones como:

• Conflictos persistentes.
• Dificultades para adaptarse a cambios importantes.
• Problemas de comunicación.
• Crisis relacionada con un miembro específico.
• Deseo de fortalecer la convivencia.

Un enfoque completo para familias más conectadas y conscientes.

Este enfoque integrado no solo busca resolver problemas, sino también fortalecer las relaciones familiares desde una perspectiva de crecimiento y aprendizaje compartido. Cada sesión se convierte en un espacio para que todos los miembros puedan reflexionar, comprenderse y encontrar juntos nueva

Cuando las familias trabajan desde la conciencia gestáltica y la comprensión sistémica, logran construir vínculos más auténticos, respetuosos y saludables.